La República Dominicana es el estado independiente y soberano desde el 1881, y ubicado en un poco más de las dos terceras partes de la Isla La Española situada en el Archipiélago de las Antillas mayores, pertenecientes al Caribe. Limita por tierra al oeste con Haití que ocupa el resto de la isla. Su superficie es de 48311 Km2, con una población de 9445281 habitantes de acuerdo con el censo del año 2010.

La isla fue descubierta para los europeos por Cristóbal Colón en el año 1492 en su primer viaje. Sus primeros pobladores fueron los taínos desde el siglo VII según las evidencias arqueológicas. El primer asentamiento de personas del Viejo Mundo en América después del siglo XV fue en la localidad de Santo Domingo, que es la actual capital de la república y la ciudad primada del Nuevo Mundo. 

Su independencia y soberanía en los primeros años fue entorpecida por invasiones de Haití, España y Estados Unidos. Ha tenido gobiernos dictatoriales y represivos en el siglo XX y actualmente cursa por un período de democracia representativa.

Se encuentra en una situación migratoria especial ya que a la vez que salen del país muchos nacionales entra gran cantidad de haitianos. Hay controversias legales y civiles en cuanto al estatus de los descendientes de esta nacionalidad que han nacido en territorio dominicano. La cifra de los haitianos y sus descendientes se acerca al millón actualmente.

Conocida como una de las grandes productoras de azúcar de caña ahora se ha movido al sector de los servicios en su economía. Tiene un avanzado sistema de comunicaciones, lo que le da un lugar privilegiado entre los países tercermundistas. Posee gran cantidad de escritores y artistas que han trascendido la frontera de lo folklórico para insertarse en el reconocimiento mundial. Su música popular es consumida por muchas personas que no son dominicanos. Sus peloteros ocupan muchas plazas en las ligas norteamericanas.

La nacionalidad dominicana, si bien es del tipo caribeño hispano, se distingue por su singularidad. De hablar rápido con un acento propio, dinámicos, creativos, muy musicales y dados al arte son una mezcla de la herencia europea y africana. Esto se manifiesta también en su cocina. Generosos, solidarios y a pesar de los múltiples conflictos vividos por su joven estado son muy orgullosos de su país y de sus costumbres. Son serviciales e inteligentes, dados al buen trato y al respeto de los visitantes.